La decisión se tomó luego del último Congreso Extraordinario de Agmer, que se realizó el fin de semana de manera virtual por la pandemia.
Los docentes exigieron al Gobierno de Gustavo Bordet la restitución del "aporte patronal histórico" del 6% a la obra social provincial Iosper.
En tanto, repudiaron lo que calificaron como "la actitud extorsiva" de la Federación Médica de Entre Ríos (Femer) que decidió suspender la atención a afiliados a Iosper, lo que "tiene de rehenes" a los trabajadores.
En Entre Ríos, unos 5.421 estudiantes de los 17 departamentos regresaron a las aulas en 398 instituciones de nivel primario y secundario habilitadas bajo protocolos sanitarios.
Semanas atrás, Agmer decidió "no concurrir a actividades presenciales" ante "la urgencia por las convocatorias de manera dispar y con los más variados propósitos del retorno a la presencialidad".
En un comunicado, el gremio reclamó medidas de forma "indispensable que tutelen sindicalmente a las y los docentes".
Agmer sostuvo que las medidas "unilaterales e improvisadas" del Poder Ejecutivo provincial "ponen en riesgo la salud de quienes integran las comunidades educativas", al "forzar el retorno a la presencialidad sin considerar el avance de la pandemia".
Los establecimientos educativos "no cuentan con las garantías de salubridad y seguridad" contra la Covid-19, indicó Agmer en base a un relevamiento que hicieron en varios departamentos de la provincia.
Además, a mediados de noviembre realizaron junto a los otros gremios un paro exigiendo una convocatoria inmediata a paritaria salarial y y que el Gobierno provincial "retroceda" en la decisión del retorno a clases presenciales.
