La Policía Federal lanzó este lunes un operativo en Río de Janeiro contra varios sospechosos de participar en actos antidemocráticos tras la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones, y que culminaron en los asaltos a las sedes de los tres poderes en Brasilia, el pasado 8 de enero.
Según la corporación, en esta operación, denominada Ulysses, se detuvo a Roberto Henrique de Souza Júnior, un bombero militar, y otras dos personas siguen en busca y captura.
Además, en un comunicado indica que la investigación se inició para identificar a los líderes locales que bloquearon las carreteras en las inmediaciones de Río de Janeiro, después de la segunda vuela de los comicios el 30 de octubre y que organizaron las protestas frente al cuartel del Ejército en esta ciudad.
Del mismo modo, también se investiga la participación de estos sospechosos "en la organización y financiación de los actos que desencadenaron la depredación de edificios públicos y los atentados contra las instituciones democráticas".
Por su parte, el Fiscal General de la República, Augusto Aras, dijo este lunes que el Ministerio Público Federal ya tiene listas 40 denuncias contra supuestos implicados en los asaltos.