Sería con barbijos y protocolos sanitarios en las aulas.
La reanudación de la actividad escolar se produciría después de las vacaciones de invierno en casi todo el país, salvo en AMBA y el Chaco. El protocolo presentado, que aún debe ser aprobado por el Consejo Federal y las autoridades universitarias, prevé el uso de tapabocas, el mantenimiento de 1,5 metro de distancia interpersonal y aulas con pocos alumnos, divididos por grupos. Los estudiantes alternarán días de actividad en la escuela y días de actividad en el hogar.
La vuelta se hará con un sistema mixto: los alumnos irán algunos días a la escuela y otros días seguirán estudiando desde sus hogares. En el caso de confirmarse un caso positivo de covid-19 dentro de la institución, se deberá cerrar el establecimiento por un día y realizarse una exhaustiva desinfección. “No podemos proyectar el regreso en Ciudad de Buenos Aires”, explicó el ministro de Educación Nicolás Trotta en la conferencia de prensa que dio.
El ministro se refería a las excepciones para el inicio de clases en agosto, que también incluirían al conurbano de la provincia de Buenos Aires y al Chaco, en donde aún hay gran circulación del virus.
El Consejo que elaboró el protocolo incluye a los sindicatos docentes; representantes del Ministerio de Salud; ministros de Educación de las distintas regiones del país; representantes de universidades, de Unicef, Unesco, Senaf, de las federaciones estudiantiles; especialistas en epidemiología e infectología y expertos de distintas áreas, como arquitectura e infraestructura escolar.