Uruguay recibió un pedido formal para que 15 familias afganas puedan lograr la condición de refugiados e instalarse en el país, a poco menos de un mes de la toma del poder en Afganistán por parte de los talibanes.
El pedido, de carácter excepcional, lo hizo una ONG cristiana y busca que residan en el país 15 familias, de entre cuatro y 10 integrantes cada una, de la etnia hazara, un grupo étnico que presenta "problemas culturales, étnicos, y hasta de creencia con los talibanes, que realmente iban a tener riesgo de vida", según un funcionario.
La carta fue recibida ayer en la Cancillería y el tema quedó al estudio del ministro de Relaciones Exteriores, Francisco Bustillo y el presidente Luis Lacalle Pou.
"Uruguay históricamente tiene los brazos abiertos para aquella gente que lamentablemente tiene que huir de su patria, así que haremos las evaluaciones correspondientes. A priori, Uruguay tiene los brazos abiertos", dijo Lacalle Pou la semana pasada.
En su edición del viernes pasado, el diario El País informó que cerca de 150 afganos, en su mayoría conversos al cristianismo y que tuvieron que huir de su país ante el temor de una persecución religiosa por parte de los talibanes, esperan en Europa que Uruguay los reciba.
La chance de la llegada depende también de que alguna otra ONG puede hacerse cargo del mantenimiento de los afganos hasta que se adapten al país, mientras el Ejecutivo les daría estatus de refugiados.
La propuesta fue presentada por el subsecretario de Ambiente, Gerardo Amarilla, quien tiene relación con la ONG Shai Foundation, y que reseñó que hace dos semanas recibió un mensaje que le informó que se buscaba reinsertar en países de América Latina a unas 150 familias que fueron retiradas de Afganistán y llevadas a un "lugar de tránsito".
