El detenido fue identificado como Luis Alberto Almeida, un albañil de 39 años de edad que era inquilino en una de las unidades de Zaramatti alquilaba en el complejo de dúplex donde vivía. Una serie de videos de cámaras de seguridad donde se lo ve entrar y salir del sitio del crimen y un par de zapatillas y una sábana con supuestas manchas de sangre, fueron los elementos que motivaron a que el fiscal de la causa, Martín Prieto, de la UFI N12 de la Costa, pidiera su detención en el marco de la causa por homicidio.
La detencion fue concretada este miércoles por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Dolores y de la Sub DDI de la Costa, en un domicilio alternativo del sospechoso ubicado en la calle Lebensohn al 300 de Mar de Ajó, a unas diez cuadras del sitio donde fue asesinada Zaramatti. “Es un hombre con problemas económicos. En los allanamientos nos llevamos un par de zapatillas y unas sábanas con aparentes manchas hemáticos que fueron clave”, reveló un jefe policial que participa de la investigación. También, agregó que de la observación de cámaras de la zona se pudo establecer que en el horario del crimen el sospechoso Almeida ingresa y egresa en reiteradas oportunidades del lugar.
Zaramatti, de 78 años de edad y profesora de educación física jubilada, fue hallada sin vida el lunes a las 17:30 por su hijo, Sergio Omar Santana, quien se desempeña como concejal por el PRO y vicepresidente primero del Concejo Deliberante del Partido de la Costa. La víctima vivía sola en uno de los dúplex ubicados en Blanco Encalada 1047, en Mar de Ajó, y era propietaria de otras unidades del mismo complejo, que alquilaba a otros vecinos.
Santana, quien reside en la localidad de Paraje Pavón, había estado de vacaciones en Entre Ríos hasta el viernes último, y fue a la casa de la madre el lunes porque ella no le contestaba los mensajes, según declaró. La mujer fue hallada tendida en el piso de la cocina y se presume que estaba preparando la cena cuando fue atacada, ya que una de las hornallas estaba encendida, y sobre la cocina, a un costado, había una olla con agua.
La autopsia indicó que la mujer falleció como consecuencia de un traumatismo de cráneo, compatible con un golpe de la plancha churrasquera de hierro con mango de madera circular de 28 centímetros de diámetro incautada en el lugar de los hechos por personal de Policía Científica.
El golpe fue sobre el parietal derecho, unos dos centímetros por encima de la oreja y, según la primera estimación forense de la data de muerte, Zaramatti fue asesinada entre las 20 y las 23 del domingo último.
Los vecinos del complejo en el que habitaba la víctima declararon que la habían visto por última vez alrededor de las 18 del domingo y uno de ellos precisó haber oído su voz cerca de las 21:30 de ese día. La principal hipótesis que se maneja es la de un homicidio vinculado con un robo, ya que en la vivienda faltaba una pequeña caja donde la mujer guardaba dinero pese a que no había nada revuelto.
Los vecinos del complejo en el que habitaba la víctima declararon que la habían visto por última vez alrededor de las 18 del domingo y uno de ellos precisó haber oído su voz cerca de las 21:30 de ese día. La principal hipótesis que se maneja es la de un homicidio vinculado con un robo, ya que en la vivienda faltaba una pequeña caja donde la mujer guardaba dinero pese a que no había nada revuelto.
Además, el asesino ingresó sin forzar nada, lo que abre la sospecha de que la mujer asesinada conocía al agresor y le permitió el ingreso a su casa. Indicaron además que en la casa fueron encontrados tanto el celular de la víctima como cadenitas de plata, que no fueron robadas pese a estar a la vista.