El temor de las personas que tienen conocimiento de lo peligrosa que puede ser la utilización de la Inteligencia Artificial (IA, por sus siglas en inglés) en armamento militar no solo ha llegado a las grandes cúpulas del poder, sino también a los ciudadanos de a pie. La ciencia ficción nos ha llevado a ver catástrofes por máquinas que se controlaban solas y esa clase de historias se pensaba que era algo imposible hace algunos años.
Sin embargo, con el avance de la tecnología, la situación ahora es otra y se ha podido ver robots que aprenden de sus errores, resuelven problemas y en algunos casos podrían sostener y hasta disparar armas de fuego. Como en todo avance, el mundo pone sus ojos en la militarización y justamente con la guerra entre Ucrania y Rusia, el miedo es aún mayor de que esta tecnología llegue a se tome para crear armas más letales y precisas.
Desde los Estados Unidos intentaron poner paños fríos al asunto y aseguraron que se está trabajando con IA no para reforzar el ejército, sino para que se pueda utilizar en cantidades gigantescas de datos. Según confirmaron desde el país del norte, lo que se quiere es que los líderes puedan tomar «las decisiones correctas» con la ayuda de esta tecnología, sostuvieron desde el Mando Central de los Estados Unidos (CENTCOM por sus siglas en inglés)
El organismo es quien resguarda la seguridad nacional del país en medio oriente y el sudeste asiático y acaban de contratar a Andrew Moore como su primer asesor en IA. El exdirector de Google Cloud AI y exdecano de la Facultad de Ciencias de la Computación de la Universidad de Carnegie Mellon, trabajará con Schuyler Morre, director de la tecnología en CENTCOM.
Asimismo, en una entrevista reciente, los expertos aseguraron que el ejército de los EE. UU. tiene como objetivo que la tecnología ayude a los humanos, pero que el control siga siendo de las personas. Además, resaltaron que todo el trabajo que se está haciendo de investigación es para poder evaluar con IA una gran cantidad de datos que ayuden a resolver diferentes situaciones que se le presentan a la humanidad.
«Existe una gran preocupación, con razón, sobre las consecuencias de las armas autónomas. Una cosa de la que he sido muy consciente en todos mis tratos con… el ejército de los EE. UU.: nunca escuché a nadie del ejército de los EE. UU. sugerir que sería una buena idea crear armas autónomas», señaló Moore en su nuevo puesto.
Por su parte, Schuyler remarcó que los militares de Estados Unidos ven a la IA como un «interruptor de luz» para que las personas puedan dar sentido y orientarse hacia la dirección correcta por el análisis de grandes caudales de información. «Debe y siempre tendrá a un humano al tanto para tomar una decisión final. Ayúdanos a tomar una mejor decisión, no tomes la decisión por nosotros», explicó.
A su vez y para ejemplificar a lo que se refieren, los expertos sostuvieron que se está discutiendo el uso de la IA para tomar medidas contra los envíos ilegales de armas a Irán. Moore contó que los funcionarios del CENTCOM creen que se podría usar esta tecnología para ayudar a los militares a reducir la cantidad de envíos, posiblemente sospechosos si la IA analiza las imágenes de las grabaciones que se realizan para hacer los controles.
Luego de que se identificó el barco sospechoso, la IA podría usar la interpretación rápida de las imágenes de los videos para dar una evaluación más precisa de lo que están transportando en las embarcaciones. «Puede imaginarse miles y miles de horas de transmisión de video o imágenes que se capturan desde una embarcación de superficie no tripulada que normalmente le tomaría a un analista horas y horas y horas», contó emocionado Moore, quien continuó «y cuando aplica algoritmos de visión por computadora, de repente puede reducir ese tiempo a 45 minutos».
También, el especialista explicó que para que se lleve a cabo esta situación se deberá realizar un gran trabajo para desarrollar las herramientas que lleven a ese punto, pero que cuando llegue ese momento se podría utilizar la tecnología para controlar el tráfico aéreo de una manera en que se interprete los patrones de amenaza y que la detección sea más rápida que las de los humanos.
«La tecnología se volvió muy buena para detectar y predecir, incluso fluctuaciones muy pequeñas. Lo que espero poder hacer en este rol… es ver si puedo ayudar a asegurar que algunos de estos métodos muy inteligentes que se usan en el sector comercial, también podamos aplicarlos para ayudar con algunos de estos grandes problemas que enfrenta el público en el sector militar», cerró el especialista.
