Luego de los anuncios realizados por el ministro de economía, que significaron un cachetazo de realidad para gran parte de la sociedad, desde el martes lo que venía siendo incertidumbre se convirtió en seria preocupación, dado que las medidas comunicadas no auguran buenos resultados, al menos para la clase trabajadora que será la más perjudicada.
En este contexto, ya hay comercios de la ciudad de Balcarce que comenzaron a restringir la venta de sus productos, e incluso otros optan por cerrar sus puertas hasta tener más certidumbre sobre los efectos que tendrán las resoluciones que convulsionaron la economía de la población.
"Estimados clientes: como no tenemos costos de mercadería y no queremos cobrar de más y tampoco fundirnos, decidimos permanecer cerrado hasta que se regularice esta situación. Ojala sea por uno o dos días nomás, gracias y disculpas por esta situación ajena a nuestro deseo", expresó en redes sociales un reconocido comerciante propietario de un negocio ubicado en pleno centro, dedicado al rubro librería mayormente.
En el mismo sentido desde otro comercio, dedicado al rubro forrajería y alimentos balanceados, expresaron también en sus redes sociales que "por razones de público conocimiento y no teniendo lista de precios, quedan restringidas las ventas mayoristas hasta tener un valor de referencia".
El ministro Caputo había anunciado una brutal devaluación económica, adelantando que desde este miércoles la cotización oficial del dolar iba a ser de 800 pesos, el que finalmente terminó vendiéndose en el Banco Nación a 820. Esto trajo una vertiginosa escalada de precios, sumando al sorpresivo (nuevo) aumento del combustible por parte de la empresa Shell, y en las próximas horas lo harán el resto de las marcas.
En general, se registran aumentos en el valor todos los bienes y servicios, aunque el más notorio es en el rubro alimentos: en 24 horas, la mayoría de los productos de consumo masivo aumentaron entre 60 y 110%.