
En consonancia con situaciones previas, los responsables de servicios de remis en Balcarce volvieron a poner de manifiesto una serie de inconvenientes que enfrenta ese sector, el cual abarca a alrededor de 120 vehículos, para poder cumplir con las diversas regulaciones impuestas para la operatividad de dicho transporte.
Entre las preocupaciones planteadas por los remiseros, se destaca la dificultad para hacer frente al canon bimestral que deben abonar al Municipio, el cual experimentó un aumento del 97%.
En respuesta a esta problemática, a la que se suma la incapacidad de cumplir con los modelos de vehículos exigidos por la normativa vigente, debido a las difíciles condiciones económicas e inflacionarias de público conocimiento, recientemente enviaron una nota conjunta al intendente Esteban Reino, la cual aún no fue contestada.
Debido a la falta de respuesta por parte de las autoridades municipales, los propietarios de remises, luego de sostener una reunión con concejales de la oposición, elaboraron un nuevo escrito dirigido al presidente del Concejo Deliberante, Agustín Cassini.
En este nuevo documento expresaron que mediante la nota previa mencionada habían solicitado un encuentro presencial con el titular del Ejecutivo para intentar llegar a una solución conjunta, pero que no habiendo a la fecha una contestación al respecto "ni del intendente ni de parte de ningún responsable" del Municipio, los remiseros piden dar curso a la solicitud ante el legislativo para darle tratamiento a todo lo planteado, "y de considerarlo necesario ser recibidos por los miembros del Concejo Deliberante", según manifestaron en el mensaje.
Es importante recordar que hace casi dos años, en mayo de 2022, la Federación Argentina de Remises (FAREM) había intentado desembarcar en Balcarce, designando incluso un delegado para intentar normalizar la situación. Oportunamente explicaron que el propósito de esta medida era que la Federación actuara como representante y defensora de los intereses de los remiseros locales en los asuntos que justamente vuelven a surgir en la actualidad. Sin embargo, la presencia de FAREM no llegó a prosperar, y el problema original persiste.