(NA) - Una fuerte tormenta azotó la ciudad de 9 de Julio y sus alrededores en la tarde de hoy, causando heridas leves a algunos vecinos, caídas de árboles, voladuras de techos y cortes en el suministro eléctrico en varios barrios.
La intensidad del temporal fue notable, con vientos huracanados, granizo y una lluvia intensa que se prolongó durante aproximadamente 40 minutos. Escobedo destacó la particularidad del fenómeno, con piedras de granizo cambiando de dirección en cuestión de segundos.
Los registros meteorológicos indican que se acumularon alrededor de 50 milímetros de lluvia en menos de una hora, exacerbando los daños materiales en diferentes áreas de la ciudad, ubicada a unos 260 kilómetros al suroeste de la Ciudad de Buenos Aires.
El alerta amarillo inicial fue seguido por un alerta naranja, aunque la intensidad de la lluvia disminuyó después de la primera oleada, incluso llegando a salir el sol posteriormente.
Equipos de Bomberos y Defensa Civil están trabajando para asistir a los damnificados, con un enfoque especial en un nuevo barrio del sur de la ciudad, donde varias viviendas resultaron con daños en el techo y en la estructura.
Los daños también afectaron a instalaciones importantes de la ciudad, como el aeroclub y el autódromo Guillermo 'Yoyo' Maldonado, utilizados para diversas competencias nacionales.
Además de 9 de Julio, otras localidades como Bragado, Carhué, Guaminí, Coronel Suárez, General Pico y Quemú Quemú, en la provincia de La Pampa, también experimentaron condiciones climáticas similares, con fuertes vientos, lluvias y granizo. Afortunadamente, no se reportaron heridos en estas áreas, pero sí se registraron daños materiales.
La intensidad del temporal fue notable, con vientos huracanados, granizo y una lluvia intensa que se prolongó durante aproximadamente 40 minutos. Escobedo destacó la particularidad del fenómeno, con piedras de granizo cambiando de dirección en cuestión de segundos.
Los registros meteorológicos indican que se acumularon alrededor de 50 milímetros de lluvia en menos de una hora, exacerbando los daños materiales en diferentes áreas de la ciudad, ubicada a unos 260 kilómetros al suroeste de la Ciudad de Buenos Aires.
El alerta amarillo inicial fue seguido por un alerta naranja, aunque la intensidad de la lluvia disminuyó después de la primera oleada, incluso llegando a salir el sol posteriormente.
Equipos de Bomberos y Defensa Civil están trabajando para asistir a los damnificados, con un enfoque especial en un nuevo barrio del sur de la ciudad, donde varias viviendas resultaron con daños en el techo y en la estructura.
Los daños también afectaron a instalaciones importantes de la ciudad, como el aeroclub y el autódromo Guillermo 'Yoyo' Maldonado, utilizados para diversas competencias nacionales.
Además de 9 de Julio, otras localidades como Bragado, Carhué, Guaminí, Coronel Suárez, General Pico y Quemú Quemú, en la provincia de La Pampa, también experimentaron condiciones climáticas similares, con fuertes vientos, lluvias y granizo. Afortunadamente, no se reportaron heridos en estas áreas, pero sí se registraron daños materiales.