La vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, expresó su sorpresa y disgusto al enterarse "por los medios" sobre la postulación del juez federal Ariel Lijo para ocupar un lugar en la Corte Suprema de Justicia (CSJ), realizada por el presidente Javier Milei.
Villarruel destacó que su descontento con Lijo no se debe a cuestiones relacionadas con denuncias de corrupción kirchnerista ni a sospechas de otros sectores de la oposición, sino por su actuación en la causa del asesinato del sindicalista José Ignacio Rucci por parte de Montoneros.
"No lo conozco, pero no me gustó cómo actuó en la causa Rucci", afirmó la vicepresidenta sobre el juez propuesto por Milei.
La causa por el asesinato de Rucci está en el juzgado de Lijo, y Villarruel expresó su desacuerdo con el hecho de que Roberto Perdía, quien falleció recientemente, no haya sido juzgado por su presunta responsabilidad en el crimen.
Además, Villarruel indicó que preferiría que la vacante en la Corte Suprema, dejada por la jubilada jueza Elena Highton de Nolasco, fuera ocupada por una mujer.
"Tengo que facilitar que la propuesta llegue a buen puerto en el Senado", subrayó Villarruel sobre el tratamiento de los pliegos, a pesar de sus diferencias con respecto a la candidatura de Lijo.
La vicepresidenta también se refirió positivamente a Manuel José García Mansilla, el otro postulante de Milei para la Corte Suprema, describiéndolo como un constitucionalista destacado.
En cuanto al tema de los decretos de necesidad y urgencia (DNU), Villarruel destacó que consultó a García Mansilla para comprender mejor el tema, destacando su conocimiento y experiencia en derecho constitucional.