
El Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) de Mar del Plata ha decidido intensificar su plan de lucha con la implementación de nuevas medidas de protesta a partir de este martes. Esta decisión se tomó en una reunión entre dirigentes gremiales y delegados, donde se evaluó el curso del reclamo por mejoras salariales.
Entre las medidas adoptadas, se ratifica la retención de servicios y la vigilia en el palacio comunal. Además, se ha decidido implementar el "Trabajo a Reglamento en estricto cumplimiento de las normas". Esto implica que los trabajadores no utilizarán autos particulares para tareas laborales, exigiendo que el Ejecutivo Municipal provea los medios de transporte necesarios. Asimismo, no responderán mensajes laborales desde sus celulares personales ni utilizarán su correo personal para este fin.
Otra medida destacada es la negativa a colaborar con insumos, herramientas, ropa de trabajo y otros elementos que no sean proporcionados por el municipio. Los dirigentes sindicales enfatizaron que los funcionarios políticos deben asumir la responsabilidad de las gestiones internas y no delegar en los trabajadores.
Además, se ha decidido no utilizar herramientas o vehículos en mal estado o que no cumplan con las normativas de seguridad vigentes. En cuanto a la salud, se informará a la comunidad sobre la falta de medicamentos y otros insumos, responsabilizando a la gestión municipal por estas deficiencias.
El sindicato también hizo un llamado al personal para que informe sobre funcionarios que no cumplen adecuadamente con sus funciones, incluyendo sus negocios y niveles de ausentismo.
En términos generales, la decisión es no cubrir las deficiencias de la administración municipal y comunicar abiertamente a los vecinos las dificultades existentes. Se instó a la comunidad a entender la cadena de mando y responsabilidad, desde los funcionarios políticos hasta el propio Intendente, responsabilizándolos por lo que consideran una mala gestión.
Estas medidas reflejan un endurecimiento en la postura del sindicato municipal, buscando presionar al Ejecutivo local para mejorar las condiciones laborales y la provisión de recursos necesarios para el correcto desempeño de las funciones municipales.