Distintas organizaciones sociales mantenían este mediodía una concentración frente a la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) para rechazar el proyecto de "Ley de Integración Productiva e Impulso al Trabajo en los Barrios Populares", que fue presentado por el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta y se votará en la sesión de este jueves.
La protesta comenzó cerca de las 9.30 en la esquina de Diagonal Sur y Perú, en el centro porteño, y era encabezada por dirigentes de las organizaciones Movimiento Popular (MP) La Dignidad, Somos Barrios de Pie y del Frente de Organizaciones en Lucha, entre otros.
Walter Córdoba, referente del Movimiento Somos Barrios de Pie Capital, dijo a Télam: "La iniciativa oficialista pone en duda la incorporación trabajadores de la economía popular aduciendo que las empresas beneficiadas con altas exenciones impositivas pueden no cumplir con el irrisorio cupo del 30% de contratación si argumentan que no encuentran trabajadores capacitados para los comercios que van a instalar".
"Estamos movilizados y exigiendo que se respete a los locales, comercios
y emprendimientos ya instalados por los habitantes de esas villas. Y
hay que recordar que esta misma Legislatura aprobó hace dos años una Ley
de Promoción y fortalecimiento de la Economía Popular y aún no la ha
implementado", agregó el dirigente.
Participaban también
columnas de militantes de la FeNaT de la CTA Autónoma, de la Corriente
Clasista y Combativa (CCC), el Frente de Organizaciones de Base (FOB
Autónoma); la organización Paritaria Social y Popular, Liberación
Popular, el MTD Aníbal Verón y la organización Soberana.
Los
manifestantes ocupaban parte de la Diagonal Sur, hacia la Plaza de Mayo,
y los accesos a la Legislatura, en tanto, estaban bloqueados con vallas
de seguridad metálicas, las cuales eran custodiadas desde adentro por
efectivos de la Policía de la Ciudad.
El Movimiento "La Ciudad
Somos Quienes la Habitamos" también participaba de la movilización, y
destacaba entre los manifestantes por llevar una marioneta gigante que
representaba a Rodríguez Larreta, con rasgos de caricatura, y carteles
amarillos que parodiaban la más reciente campaña publicitaria del
Gobierno porteño, con la leyenda "La precarización no para".
El miércoles, a través de un comunicado de prensa conjunto, las
organizaciones sociales denunciaron que "el gobierno de Rodríguez
Larreta busca con esta ley allanar el camino para la instalación de
grandes empresas en detrimento de los comercios y unidades productivas,
en los barrios que se encuentran involucrados en el proceso de
'reurbanización' como son el Padre Mugica, Rodrigo Bueno, Playón
Chacarita y Villa 20".
Las agrupaciones que convocan a
esta protesta rechazan el denominado proyecto de "Ley de Integración
Productiva e Impulso al Trabajo en los Barrios Populares" por considerar
que esa iniciativa "no busca fomentar la integración productiva y el
trabajo en los barrios populares".
"No es más que una estrategia de comunicación publicitaria que engaña a la ciudadanía. Con esta ley, el Gobierno de Rodríguez Larreta busca garantizar grandes exenciones impositivas para grandes empresas, cadenas y multinacionales, descontando hasta un 80% en Ingresos Brutos para las firmas que allí se radiquen. Con ello, promueve una competencia desleal con los comercios y emprendimientos de la zona y, a su vez, no garantiza nuevos puestos de trabajo para la población local", señalaron.
Flavia Romero, referente del Frente Popular Darío Santillán (FPDS) y parte de la Junta vecinal de la Villa 21/24, afirmó que "otra vez el Gobierno porteño quiere hacer negocio en nuestros barrios".
"Estamos movilizados para decir no a la 'Ley Farmacity', que quiere darle beneficio a grandes empresas para que se instalen en barrios populares desplazando a los pequeños comercios de los vecinos de nuestros barrios", señaló Romero en declaraciones a Télam.
El proyecto de Rodíguez Larreta
La Legislatura de
la Ciudad de Buenos Aires votará este jueves un proyecto de ley
presentado por el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, para
crear un "distrito de integración productiva e impulso al trabajo" para cuatro barrios populares, iniciativa cuestionada por organizaciones de vecinos y bloques políticos opositores porque "beneficiará a grandes empresas" en perjuicio de los emprendimientos locales.
El nuevo distrito incluirá a los barrios Rodrigo Bueno, Villa 20, Playón de Chacarita y Padre Mugica
y se sumará a otros que ya existen en la ciudad, como el Tecnológico,
en Parque Patricios; el de Diseño, en Barracas; o el Deportivo, en
Lugano y Villa Soldati.
Mediante los distritos ya existentes, el gobierno de la Ciudad otorga descuentos impositivos a las empresas que se radican en determinadas zonas para desarrollar las actividades que pretende fomentar.
El nuevo distrito, en cambio, abarca una gama amplia de rubros, como farmacias, bancos, alimentos, textiles y centros médicos.
Durante el debate en comisiones, el oficialismo porteño -Juntos por el
Cambio (JxC)- sostuvo que el objetivo del proyecto es "promover el
desarrollo económico" de los barrios, pero tanto los vecinos como el
Frente de Todos (FdT), principal bloque opositor, advirtieron que los emprendimientos locales serán perjudicados por la competencia desleal de grandes empresas, que ya tienen locales en el resto de la ciudad.
"El PRO busca instalar negocios como Farmacity, carnicerías RES y
Rapipago en los accesos principales de estos barrios, quitando trabajo e
ingresos para los cientos de comerciantes que viven de sus almacenes,
kioscos, carnicerías, entre otros y que mantienen a sus familias",
advirtió en un comunicado el legislador del FdT Juan Modarelli.
"El
gobierno de Rodríguez Larreta busca con esta ley allanar el camino para
la instalación de grandes empresas en detrimento de los comercios y
unidades productivas", denunciaron estas organizaciones en un comunicado conjunto.
Y agregaron que el Gobierno porteño pretende "garantizar grandes
exenciones impositivas para grandes empresas, cadenas y multinacionales,
descontando hasta un 80% en Ingresos Brutos", con lo que "promueve una
competencia desleal con los comercios y emprendimientos de la zona y, a
su vez, no garantiza nuevos puestos de trabajo para la población local".
Uno de los artículos del proyecto establece que las empresas deberán tener al menos un 30 por ciento de empleados que residan en los barrios populares, pero a la vez, sujeta esta obligación a la "disponibilidad de trabajadores con experiencia en los rubros requeridos".
"El verdadero espíritu del proyecto de ley es continuar profundizando la
estrategia de expulsión lenta de los pobladores de estos barrios
-gentrificación- para liberar estos suelos a la especulación
inmobiliaria", advirtieron por su parte desde el Observatorio del
Derecho a la Ciudad, organización que también se opone al proyecto de
Rodríguez Larreta.
En este sentido, los vecinos también
afirmaron, durante el debate en comisiones, que el valor del suelo de
los barrios populares aumentará con la instalación de empresas, lo que
impactará en el valor de los alquileres de sus viviendas y comercios.