El intendente Esteban Reino, en declaraciones a la señal de cable Somos, se manifestó en total desacuerdo primero a la decisión del presidente Alberto Fernández de decretar feriado este viernes luego del ataque frustrado que sufriera la vicepresidenta, y sobre todo con las marchas y movilizaciones de la sociedad en las calles.
A pesar de haber sido uno de los primeros (y de los pocos) a nivel local en manifestar en las redes sociales su repudio al intento de magnicidio contra Cristina Kirchner, el titular del Ejecutivo local consideró que "tanto de un lado como de otro hay dos facciones muy fanatizadas que no le hacen nada bien al país ni a la sociedad. Creo que hay que ir cerrando esta grieta".
Respecto de las convocatorias en todo el país para mostrar su apoyo al sistema democrático, y que Balcarce no fue la excepción, expresó que "tampoco estoy de acuerdo con la movilizaciones que hacen en este contexto de país. Hace 15 o 20 días que están incitando a las movilizaciones como que hay que ganar la calle. Acá lo que hay que ganar es trabajo. Paz, trabajo".
"Hay que tratar de que los que trabajan puedan llegar a fin de mes, que es de lo que debemos hablar los que tenemos responsabilidad política y no la tenemos que eludir", dijo Reino y realizó una comparación con la gestión de Mauricio Macri al aseverar que "nosotros también tuvimos inconvenientes severos cuando nos tocó gobernar y perdimos".
"Están con esa épica de no sé qué año que, aunque digan que pasa en todo el mundo (sobre las manifestaciones públicas masivas) no se ve en ningún lado. Alguien dice algo y hay que ganar las calles, las movilizaciones. No, la gente tiene que estar en la casa y más en este contexto. Eso mientras vemos cómo solucionamos el grave problema que tenemos en la economía, y el grave problema social que estamos atravesando los argentinos con la degradación de la educación, de la salud, en todo aspecto", sostuvo.
El intendente expresó que "hace muchísimos años que venimos en una decadencia absoluta, y me parece que esto de estar en la calle los capitalinos, los habitantes de ciudades como Buenos Aires lo sufren todos los días".
"¿Qué es esto de estar en movilización permanente de gente a la que el Estado está ayudando? Yo no comparto esto. Porque, ¿qué pasaría si la gente que trabaja todos los días y la plata no le alcanza, y es mucha más gente que recibe ayudas, se empieza a movilizar? ¡Vamos a estar en una movilización permanente? Y me refiero al que se levanta a laburar a las 6 de la mañana, al cuentapropista, al empleado", se preguntó el mandatario.
Finalmente consideró que "si las movilizaciones fueran la solución, como hace 20 años que lo vienen fomentando, no se habría generado en la sociedad argentina más pobreza, resentimiento y odio de facciones fanatizadas".
A pesar de haber sido uno de los primeros (y de los pocos) a nivel local en manifestar en las redes sociales su repudio al intento de magnicidio contra Cristina Kirchner, el titular del Ejecutivo local consideró que "tanto de un lado como de otro hay dos facciones muy fanatizadas que no le hacen nada bien al país ni a la sociedad. Creo que hay que ir cerrando esta grieta".
Respecto de las convocatorias en todo el país para mostrar su apoyo al sistema democrático, y que Balcarce no fue la excepción, expresó que "tampoco estoy de acuerdo con la movilizaciones que hacen en este contexto de país. Hace 15 o 20 días que están incitando a las movilizaciones como que hay que ganar la calle. Acá lo que hay que ganar es trabajo. Paz, trabajo".
"Hay que tratar de que los que trabajan puedan llegar a fin de mes, que es de lo que debemos hablar los que tenemos responsabilidad política y no la tenemos que eludir", dijo Reino y realizó una comparación con la gestión de Mauricio Macri al aseverar que "nosotros también tuvimos inconvenientes severos cuando nos tocó gobernar y perdimos".
"Están con esa épica de no sé qué año que, aunque digan que pasa en todo el mundo (sobre las manifestaciones públicas masivas) no se ve en ningún lado. Alguien dice algo y hay que ganar las calles, las movilizaciones. No, la gente tiene que estar en la casa y más en este contexto. Eso mientras vemos cómo solucionamos el grave problema que tenemos en la economía, y el grave problema social que estamos atravesando los argentinos con la degradación de la educación, de la salud, en todo aspecto", sostuvo.
El intendente expresó que "hace muchísimos años que venimos en una decadencia absoluta, y me parece que esto de estar en la calle los capitalinos, los habitantes de ciudades como Buenos Aires lo sufren todos los días".
"¿Qué es esto de estar en movilización permanente de gente a la que el Estado está ayudando? Yo no comparto esto. Porque, ¿qué pasaría si la gente que trabaja todos los días y la plata no le alcanza, y es mucha más gente que recibe ayudas, se empieza a movilizar? ¡Vamos a estar en una movilización permanente? Y me refiero al que se levanta a laburar a las 6 de la mañana, al cuentapropista, al empleado", se preguntó el mandatario.
Finalmente consideró que "si las movilizaciones fueran la solución, como hace 20 años que lo vienen fomentando, no se habría generado en la sociedad argentina más pobreza, resentimiento y odio de facciones fanatizadas".