A casi dos meses, la Costa continúa consternada por el crimen de la madre de un concejal

Fue asesinada a golpes con una churrasquera. El albañil imputado por el delito se negó a declarar y continúa detenido.

La comunidad de Partido de la Costa continúa consternada luego del brutal crimen de Beatriz Irma Zaramatti, madre del concejal Sergio Santana, a casi dos meses del trágico suceso. Por el hecho, un albañil que era inquilino de una de las propiedades que Zaramatti poseía permanece detenido y al día de la fecha no ha prestado declaración.

Al momento del femicidio, Zampatti tenía 78 años y estaba jubilada tras haber ejercido como profesora de educación física y fue hallada sin vida por su propio hijo, quien volvía de un viaje el pasado 27 de marzo. Al notar que no le contestaba los mensajes, Santana acudió de inmediato al domicilio que la víctima tenía en la localidad de Mar de Ajó y allí se topó con el cuerpo de su madre, que estaba tendido en el suelo con una herida en la cabeza.

Las pericias indicaron que Zaramatti fue golpeada con una bifera que le produjo hundimiento de cráneo y una importante pérdida de sangre y los investigadores presumieron que la mujer se encontraba cocinando al momento del hecho, ya que una de las hornallas estaba encendida, además de haber encontrado una olla con agua. Con la principal hipótesis de un homicidio en ocasión de robo, se procedió a detener a Luis Alberto Almeida, albañil de 39 años, oriundo de Merlo e inquilino de una de las unidades del complejo de dúplex que la jubilada alquilaba.

El albañil imputado por el delito se negó a declarar y continúa detenido.

Según detalló el fiscal Martín Prieto, quien lleva adelante la causa, tras asesinar a la dueña del inmueble, Almeida subió a la planta alta del mismo y robó 1000 dólares y 245 mil pesos que la víctima guardaba dentro un placard para luego darse a la fuga. Otro dato de importancia fue el que dio el concejal Santana, que indicó que su madre era confiada y contaba dinero frente a sus inquilinos. Al momento de la fuga, el acusado había dejado en la casa que alquilaba un par de zapatillas y un juego de sábanas con manchas de sangre.

Afortunadamente, personal de la Policía Bonaerense logró interceptarlo cuando estaba armando los bolsos para escaparse. A pesar de que fue detenido de inmediato, el albañil se negó a prestar declaración y está imputado por el delito de “homicidio agravado criminis causa, en concurso real con robo agravado por uso de arma impropia”. Interviene el Juzgado de Garantías Nº4 de Mar del Tuyú, a cargo de Diego Olivera Zapiola.