La madrugada del sábado en la zona de calles 85 y 4 de Necochea se convirtió en el escenario de un caótico incidente cuando un grupo de personas, al abandonar un boliche, desató disturbios que culminaron en agresiones físicas a tres agentes policiales. Estos uniformados, que trataban de restablecer el orden, resultaron con lesiones y fueron objeto de amenazas de muerte. Incluso, un patrullero también sufrió daños durante la tumultuosa situación.
La intervención policial llevó a la detención de tres individuos que, posteriormente, quedaron bajo la jurisdicción de la justicia. Es importante destacar que la falta de controles continuos es un factor que contribuye a la ocurrencia de eventos de esta índole.
La denuncia formal presentada en la Comisaría Tercera detalla que los hechos tuvieron lugar antes de las seis de la mañana del sábado, en las inmediaciones de un boliche ubicado en 85 y 4. En ese momento, los efectivos policiales observaron un tumulto en la calle protagonizado por personas que salían del establecimiento nocturno, entre insultos y empujones.
El Jefe de Gabinete Técnico y un Subcomisario, quienes resultaron ser los efectivos afectados, se aproximaron a los jóvenes con el objetivo de dispersar la multitud. Fue en este momento cuando uno de los individuos presentes, posteriormente identificado como Ibarlucea, de 22 años, comenzó a proferir amenazas de muerte a un uniformado, alegando que este lo había detenido anteriormente.
De forma inmediata, el joven se abalanzó sobre el policía, propinándole golpes con puño en el rostro. Simultáneamente, otro sujeto, también de apellido Ibarlucea y de 42 años, corrió hacia el uniformado caído y le propinó una patada en la espalda, derribándolo.
Ante esta violenta situación, el Subcomisario intentó intervenir, pero también fue agredido. Según fuentes oficiales, en medio de la agresión, el Subcomisario se vio obligado a resguardar su arma reglamentaria, ya que los agresores intentaban arrebatársela. Mientras los golpes, insultos y amenazas continuaban, el otro agente solicitó refuerzos y acudió al lugar un segundo móvil con dos efectivos, uno de los cuales también resultó herido en el rostro.
La situación se volvió incontrolable, sumándose un tercer agresor identificado como Marrone, de 27 años. Ante la gravedad de la situación, más unidades policiales llegaron al lugar y recurrieron a disparos con cartuchos de estruendo para dispersar a la multitud.
Finalmente, los agresores fueron detenidos, dando inicio a una causa por delitos que incluyen atentado y resistencia a la autoridad, lesiones, amenazas y daños agravados. Marrone, por su parte, fue aprehendido por atentado y resistencia a la autoridad, lesiones y amenazas.
Además de las consecuencias para los agentes de seguridad, uno de los móviles, un Renault Oroch, sufrió daños en la puerta y guardabarro izquierdo como resultado de la violencia desatada en la salida del boliche.
Fuente: Diario4V
