
Se trata de uno de los papiros de Herculano, de 2 mil años. Su trabajo reveló lo que se cree que son textos desconocidos del filósofo Filodemo.

Tres jóvenes científicos han sido galardonados con el gran premio del Desafío del Vesubio por su notable logro en descifrar pasajes de un papiro carbonizado de Herculano, hasta ahora ilegibles, utilizando inteligencia artificial.
Este avance es especialmente significativo considerando que más de mil papiros quedaron sepultados y cubiertos por los escombros volcánicos cuando el Vesubio entró en erupción hace unos 2.000 años. Estos papiros se encontraban en la biblioteca de una villa romana en la antigua ciudad de Herculano y fueron descubiertos en el siglo XIX por un agricultor local.
A lo largo de los años, numerosos intentos por leer estos antiguos rollos de papiro resultaron en su destrucción, dado su estado frágil y carbonizado después de siglos bajo tierra. Sin embargo, Youssef Nader, Luke Farritor y Julian Schilliger, los ganadores del premio, han logrado superar este desafío leyendo cuatro pasajes sin necesidad de desenrollar los papiros.
Utilizando el aprendizaje automático, una forma de inteligencia artificial, estos jóvenes científicos contribuyeron de manera significativa a la comunidad de los papiros del Vesubio. Su trabajo reveló lo que se cree que son textos desconocidos del filósofo Filodemo, quien escribió sobre la búsqueda de una vida plena a través de los placeres de la belleza, la música y la comida.
El proceso para lograr este avance involucró la utilización de tecnología de tomografía computarizada (TC) para "desenrollar" digitalmente los papiros, seguido por el uso de algoritmos de aprendizaje automático para detectar la tinta en los segmentos aplanados del papiro. Este enfoque permitió a los científicos reconstruir y leer el texto antiguo de manera efectiva.
El profesor Brent Seales de la Universidad de Kentucky, quien llevaba décadas trabajando en el desciframiento de los papiros de Herculano, fue fundamental en este proceso. Los avances significativos se produjeron cuando Seales, junto con el empresario de Silicon Valley Nat Friedman y el ingeniero Daniel Gross, lanzaron el concurso en marzo de 2023.
El concurso atrajo la atención de talentosos jóvenes científicos como Farritor, Nader y Schilliger, quienes lograron avances significativos en la lectura y comprensión de los textos antiguos. Este logro representa un emocionante paso adelante en el campo de la arqueología y la inteligencia artificial, y proporciona una valiosa ventana al mundo clásico que de otro modo habría permanecido cerrada.
Este avance es especialmente significativo considerando que más de mil papiros quedaron sepultados y cubiertos por los escombros volcánicos cuando el Vesubio entró en erupción hace unos 2.000 años. Estos papiros se encontraban en la biblioteca de una villa romana en la antigua ciudad de Herculano y fueron descubiertos en el siglo XIX por un agricultor local.
A lo largo de los años, numerosos intentos por leer estos antiguos rollos de papiro resultaron en su destrucción, dado su estado frágil y carbonizado después de siglos bajo tierra. Sin embargo, Youssef Nader, Luke Farritor y Julian Schilliger, los ganadores del premio, han logrado superar este desafío leyendo cuatro pasajes sin necesidad de desenrollar los papiros.
Utilizando el aprendizaje automático, una forma de inteligencia artificial, estos jóvenes científicos contribuyeron de manera significativa a la comunidad de los papiros del Vesubio. Su trabajo reveló lo que se cree que son textos desconocidos del filósofo Filodemo, quien escribió sobre la búsqueda de una vida plena a través de los placeres de la belleza, la música y la comida.
El proceso para lograr este avance involucró la utilización de tecnología de tomografía computarizada (TC) para "desenrollar" digitalmente los papiros, seguido por el uso de algoritmos de aprendizaje automático para detectar la tinta en los segmentos aplanados del papiro. Este enfoque permitió a los científicos reconstruir y leer el texto antiguo de manera efectiva.
El profesor Brent Seales de la Universidad de Kentucky, quien llevaba décadas trabajando en el desciframiento de los papiros de Herculano, fue fundamental en este proceso. Los avances significativos se produjeron cuando Seales, junto con el empresario de Silicon Valley Nat Friedman y el ingeniero Daniel Gross, lanzaron el concurso en marzo de 2023.
El concurso atrajo la atención de talentosos jóvenes científicos como Farritor, Nader y Schilliger, quienes lograron avances significativos en la lectura y comprensión de los textos antiguos. Este logro representa un emocionante paso adelante en el campo de la arqueología y la inteligencia artificial, y proporciona una valiosa ventana al mundo clásico que de otro modo habría permanecido cerrada.