(NA) - La prensa rusa destaca el creciente distanciamiento entre la abogada Victoria Villarruel y el presidente Javier Milei, quienes conformaron una sorprendente fórmula presidencial que emergió victoriosa tras una reñida contienda con Sergio Massa. Según informes, desde su ascenso al poder, la relación entre ambos ha sido notablemente fría, evidenciada por la ausencia de interacciones públicas y el mutuo silencio en sus discursos.
Un artículo de Actualidad RT resalta que recientemente, el tono de las redes sociales de Villarruel ha dado un giro, reflejando un comportamiento más similar al del presidente Milei, caracterizado por un uso exacerbado y controvertido, compartiendo incluso un video que la presenta como una heroína, generado por inteligencia artificial. Esta acción provocó una reacción inmediata y crítica, especialmente considerando que Milei había publicado poco antes una ilustración de sí mismo como 'Terminator'.
La tensión entre ambos ha suscitado comparaciones con otras parejas presidenciales disfuncionales en la historia argentina, como De la Rúa-Álvarez, Kirchner-Scioli, Fernández de Kirchner-Cobos/Boudou, Macri-Michetti y Fernández-Cristina Fernández de Kirchner. Esta disputa se atribuye en parte a "promesas incumplidas", ya que durante la campaña Milei había asegurado que Villarruel estaría a cargo de áreas clave como seguridad y defensa, pero tras la victoria, dichos puestos fueron ocupados por otra fórmula rival.
Desde la campaña, Villarruel ha protagonizado eventos individuales y ha adoptado un logotipo propio, algo inusual en la política argentina, lo que ha exacerbado las tensiones dentro de la coalición gobernante.
El artículo también aborda aspectos controvertidos de la vicepresidenta, incluida su supuesta militancia a favor de represores durante la última dictadura militar y su oposición al aborto y al feminismo. Se menciona además un encuentro secreto con el expresidente Mauricio Macri en Bariloche, que alimentó rumores de una conspiración.
A pesar de estos desencuentros, Villarruel ha mantenido una agenda propia, participando en eventos militares y encuentros con políticos conservadores, productores agropecuarios y embajadores, mostrándose serena y sonriente, en contraste con la agitación y confrontación característica de Milei.
El artículo resalta que aunque estos desacuerdos son comunes en la historia argentina, no los detalla debido a su enfoque en períodos democráticos, aunque menciona eventos como el reemplazo de Viola por Galtieri en 1979 y la salida de este último después de la guerra de Malvinas.