

Durante la decimoséptima sesión ordinaria del año del Honorable Concejo Deliberante (HCD) de Balcarce, celebrada este jueves por la noche, el concejal Ángel Enrique Guillén, de La Libertad Avanza, aprovechó el debate del presupuesto municipal 2026 para instalar nuevamente un tema que viene generando tensión política en la ciudad: la presidencia del cuerpo legislativo local.
Mientras los ediles discutían la asignación de recursos para el próximo ejercicio fiscal, Guillén realizó una sorpresiva intervención en la que cuestionó la falta de diálogo por parte del oficialismo con los concejales electos que asumirán el 10 de diciembre, fecha en la que se renuevan las autoridades del HCD.
El concejal violeta comenzó su exposición contextualizando la naturaleza institucional del Concejo: "El Concejo Deliberante es un cuerpo colegiado, instituido en la Constitución Provincial, regido también por la Ley Orgánica de las Municipalidades. Tiene un presupuesto asignado por ley de hasta el 2% del presupuesto municipal".
La tradición de 40 años
El eje central de su planteo se enfocó en lo que describió como una tradición de cuatro décadas en Balcarce. Según argumentó Guillén, "hace 40 años hay un acuerdo en este Concejo Deliberante que el que gana las elecciones también se queda con la presidencia del Cuerpo". Esta práctica, que se remonta al año 1985 —primera elección legislativa tras el retorno de la democracia en Argentina—, establece de manera tácita que la lista más votada en los comicios locales tiene derecho a presidir el HCD. O al menos eso es lo que siempre se acordó entre todos los espacios políticos a lo largo de los años."Considero un error que el Presidente del cuerpo y el bloque oficialista no hayan convocado a los ganadores de la elección de la comunidad de Balcarce", señaló el edil en referencia a los comicios realizados el 7 de septiembre pasado, cuando La Libertad Avanza obtuvo una victoria en las urnas —inesperada por muchos—, desplazando por primera vez en más de una década al radicalismo del primer lugar en los resultados electorales.
Más allá de la cuestión institucional y el reclamo puntual, Guillén aprovechó para cuestionar algunas partidas específicas del presupuesto del Concejo Deliberante. "No veo la necesidad en este cuerpo legislativo de comprar cámaras de seguridad, la verdad que no la veo", afirmó, sugiriendo que "quizá no hubiera sido la prioridad de los que van a entrar el 10 de diciembre".
Más allá de la cuestión institucional y el reclamo puntual, Guillén aprovechó para cuestionar algunas partidas específicas del presupuesto del Concejo Deliberante. "No veo la necesidad en este cuerpo legislativo de comprar cámaras de seguridad, la verdad que no la veo", afirmó, sugiriendo que "quizá no hubiera sido la prioridad de los que van a entrar el 10 de diciembre".
El concejal lamentó además que no se hubiera contemplado la renovación de equipamiento informático ante la llegada de nuevos ediles: "Hubiese sido bueno, y hubiese sido democrático, que se hubiera convocado por parte de este Concejo Deliberante y de la presidencia de este cuerpo, a quienes han sido victoriosos en la última elección para charlar del presupuesto del Concejo y de proyectos para el 2026, que por lo menos hubiera figurado en el presupuesto que van a adquirir nuevas computadoras porque va a haber nuevos concejales y porque se van a conformar nuevos bloques".
¿Cambios en las reglas de juego?
En un tono más político, Guillén advirtió sobre lo que consideró un posible intento de modificar las reglas no escritas que rigen la asignación de la presidencia del HCD. "Espero que esa 'no convocatoria', que ese 'no llamado', ese desinterés, no sea un intento de cambio de las reglas de juego de estos 40 años de democracia de Balcarce", expresó.El edil realizó también una alusión al intendente Esteban Reino, quien según sus palabras, "se hace el distraído" ya que "hace unos años atrás, en el año 2013, llegó a la presidencia de este cuerpo, y ahora quiere cambiar las reglas de juego de hace muchos años atrás". Si bien no lo mencionó directamente, la referencia permite inferir que se trata de la figura del Jefe comunal: al obtener ese año la victoria en las urnas, mientras el peronista José Enrique Echeverría era el intendente de entonces, Reino se hizo de la presidencia, siendo el principal opositor a la gestión.
El contexto político
El debate se da en un momento particular para Balcarce: las elecciones de septiembre marcaron un cambio disruptivo en la composición del Concejo Deliberante, con la creciente incursión de La Libertad Avanza como fuerza política relevante en el distrito.La renovación de autoridades que se producirá el 10 de diciembre próximo abrirá un nuevo período legislativo que, de acuerdo con la tradición mencionada por Guillén, debería tener a un representante de la lista ganadora al frente del cuerpo. Sin embargo, la falta de convocatoria formal a los concejales electos para discutir presupuesto y proyectos genera incertidumbre sobre si esa costumbre se mantendrá.
En los pasillos del legislativo es algo que se comenta por lo bajo, con opiniones encontradas y posiciones dubitativas, provocando que se cree un clima teñido de incertidumbre y especulación, poniendo en el centro de la discusión un "cargo" que, a prima facie, no trasciende mucho por encima de una responsabilidad meramente institucional. Desde LLA se teoriza con que el "quid de la cuestión" gira en torno a la intención del radicalismo de no mostrar más signos de fragilidad y debilidad política.
Más allá del tema principal de la sesión del último jueves —la aprobación del presupuesto municipal para 2026 por más de 60 mil millones de pesos—, Guillén insistió en el gesto silencioso del oficialismo. "Es triste, es lamentable, pero eso pasa acá", concluyó el concejal libertario, dejando planteada una tensión que deberá resolverse en las próximas semanas, cuando se concrete el cambio de autoridades en el Concejo Deliberante de Balcarce.
Más allá del tema principal de la sesión del último jueves —la aprobación del presupuesto municipal para 2026 por más de 60 mil millones de pesos—, Guillén insistió en el gesto silencioso del oficialismo. "Es triste, es lamentable, pero eso pasa acá", concluyó el concejal libertario, dejando planteada una tensión que deberá resolverse en las próximas semanas, cuando se concrete el cambio de autoridades en el Concejo Deliberante de Balcarce.
