Se prevé una larga semana de calor sofocante sobre el centro y norte de la Argentina, con una ola de calor que promete ser de las más intensas registradas en los últimos años.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), este lunes será un día de calor relativamente moderado respecto a lo que vendrá hacia mitad de semana en adelante. De hecho, este ascenso térmico se verá brevemente interrumpido entre martes y miércoles por un frente frío sin actividad que solo afectará la porción sur y este de la Provincia de Buenos Aires en donde generará un descenso temporario de temperaturas.
En la Costa Atlántica, es muy probable se produzcan ráfagas fuertes durante la tarde del martes, alcanzando la zona de La Ciudad de Buenos Aires y el Río de la Plata en la noche. Durante el miércoles, predominará el viento del este, trayendo un temporario respiro en las temperaturas sobre esta porción acotada del país, en tanto que en el resto del centro y norte argentino seguirán muy elevadas las marcas.
Temperaturas extrema: ¿de cuánto hablamos?
Es posible que en gran parte de la Provincia de Buenos Aires se superen los 40 °C, algo totalmente inusual de registrar. Sobre el centro y noroeste provincial podrían darse marcas de hasta 43 °C, con 40 °C incluso en cercanías de la Costa Atlántica. En Capital Federal, el viernes podría tocarse un pico de 41 °C, marcas que no se alcanzan en más de 25 años.
¿Cómo afecta una ola de calor al cuerpo humano?
Apenas terminamos de salir de un extenso periodo de temperaturas extremas y ya vamos camino hacia otro. No hay dudas de que esta puede ser la normalidad en los próximos años. Con una nueva ola de calor a la vuelta de la esquina, y con hospitales saturados por la pandemia, es posible que los problemas de salud relacionados con las temperaturas no tarden en llegar.
La exposición prolongada al calor puede provocar mareo, dolor de cabeza, vómitos y sensación de cansancio y decaimiento. Estos síntomas son leves, y en general se puede tratar con descanso, un ambiente fresco e hidratación. Pero cuando llegamos al golpe de calor, la cosa se vuelve más seria y se requiere asistencia médica de inmediato.
Agotamiento y golpe de calor
El agotamiento por calor es un estadio previo al golpe de calor hay que reconocer para prevenir una situación más grave. Algunos indicios de este estado son:
- Sudoración excesiva
- En los bebés puede verse la piel muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal (sudamina)
- Piel pálida y fresca
- Sensación de calor sofocante
- Sed intensa y sequedad en la boca
- Calambres musculares
- Agotamiento, cansancio o debilidad
- Dolores de estómago, inapetencia, náuseas o vómitos
- Dolores de cabeza
- Irritabilidad (llanto inconsolable en los más pequeños)
- Mareos o desmayo
El golpe de calor es una situación muy grave en la que el cuerpo no puede regular su temperatura interna y alcanzar valores superiores a los 39°C o 40°C (medida en la axila). Además, también se observa la piel roja caliente y seca debido a que se agota la transpiración, respiración y frecuencia cardiaca acelerada, dolor palpitante de cabeza, alteración del estado mental y del comportamiento como: vértigos, mareos desorientación, delirios, confusión o pérdida de conocimiento. Y en los casos más extremos, puede haber convulsiones.