"El salario no les alcanza, hay un abuso brutal de los formadores de precios, el gobierno no ha reaccionado a la altura y casi que pareciera que están reafirmando la política económica del gobierno anterior en esta alianza con el FMI”, consideró.
En cuanto a la consulta sobre la postura del presidente Alberto Fernández en este contexto, Micheli consideró que “no tiene sentido cargar las tintas ahora sobre una sola persona, sino que queda más expuesta que nunca la imperiosa necesidad de unidad del campo popular, un acuerdo social entre sindicatos, empresarios y con el pueblo en la calle”.
En este sentido, el líder sindical enfatizó que insiste “con la necesidad de recuperar la calle”, e hizo una autocrítica, la cual señaló que coincidió días atrás con Pablo Moyano, al considerar que “Nunca debíamos haber abandonado la unidad de acción que construimos y que nos llevó a juntar más de 500 mil trabajadores y trabajadoras contra las políticas de ajuste del gobierno de Macri. No salimos a la calle cuando el presidente dio marcha atrás en la decisión de expropiar Vicentín, cuando fue el acuerdo con el FMI. Nos relajamos por tener un gobierno propio y no es así, porque las cosas no funcionan bien por sí solas, y el poder avanza, te mete una corrida cambiaria, te persigue a los cuadros políticos, sociales y sindicales, te intenta matar a la vicepresidenta. Entonces, para parar este estrago de la justicia que permite todo esto, es necesario, mínimo, un millón de personas en la calle”.
En cuanto a la consulta sobre la postura del presidente Alberto Fernández en este contexto, Micheli consideró que “no tiene sentido cargar las tintas ahora sobre una sola persona, sino que queda más expuesta que nunca la imperiosa necesidad de unidad del campo popular, un acuerdo social entre sindicatos, empresarios y con el pueblo en la calle”.
En este sentido, el líder sindical enfatizó que insiste “con la necesidad de recuperar la calle”, e hizo una autocrítica, la cual señaló que coincidió días atrás con Pablo Moyano, al considerar que “Nunca debíamos haber abandonado la unidad de acción que construimos y que nos llevó a juntar más de 500 mil trabajadores y trabajadoras contra las políticas de ajuste del gobierno de Macri. No salimos a la calle cuando el presidente dio marcha atrás en la decisión de expropiar Vicentín, cuando fue el acuerdo con el FMI. Nos relajamos por tener un gobierno propio y no es así, porque las cosas no funcionan bien por sí solas, y el poder avanza, te mete una corrida cambiaria, te persigue a los cuadros políticos, sociales y sindicales, te intenta matar a la vicepresidenta. Entonces, para parar este estrago de la justicia que permite todo esto, es necesario, mínimo, un millón de personas en la calle”.