

Este domingo 7 de septiembre, Balcarce se prepara para un escrutinio que podría reconfigurar su mapa político local. Con poco más de 42 mil electores habilitados para votar en 123 mesas, los comicios no solo renovarán 9 de las 18 bancas del Concejo Deliberante, sino que también pondrán a prueba la fortaleza de los espacios políticos que vienen dominando la escena local y la capacidad de los nuevos actores para alterar el equilibrio de poder.
El oficialismo actual, compuesto por una alianza entre el radicalismo y el PRO, enfrenta este desafío electoral con una ventaja numérica que podría verse reducida. De las 11 bancas que hoy todavía ostenta, seis concejales culminan sus mandatos en diciembre: Gonzalo Scioli (el único que busca la reelección encabezando la lista de Somos BA), Claudia Higuera, Cristhian Coria, Javier Murias (UCR), Miriam Salvo (UCR) y Florencia Paccelle (PRO). Estos dos últimos, por haber cumplido dos períodos consecutivos, no podrán volver a ocupar una banca hasta 2027.
Según sondeos internos cuyos resultados permanecen guardados "bajo siete llaves" en el Municipio, el oficialismo podría perder dos bancas, obteniendo solo cuatro de los nueve cargos en juego. De confirmarse esta proyección, la fuerza gobernante se quedaría con exactamente la mitad de las bancas (9), un número considerable pero debajo de los 12 escaños que llegó a controlar en su momento de mayor apogeo.
Desde el oficialismo se reconoce, en voz baja, que estos comicios generarán una "distribución más equitativa" de las bancas. La novedad radica en la fragmentación del escenario político: a la tradicional disputa entre radicalismo y peronismo se suman ahora dos actores emergentes. Por un lado, La Libertad Avanza, que irrumpió con fuerza en las elecciones generales de 2023; por otro, el frente Potencia BA, que presenta como exponente a Gabriel Petruccelli, una candidatura que no cayó nada bien en algunas de las variopintas parcelas del peronismo, por considerar que "se cortó solo" en sus aspiraciones de volver al ruedo político. Vale recordar que el médico llegó a ser presidente del Partido Justicialista local.
Los cinco espacios en competencia representan un abanico diverso:
- Fuerza Patria (peronismo-kirchnerismo), con Sol Di Gerónimo como primera candidata
- Somos Buenos Aires (oficialismo radical-PRO), liderado por Gonzalo Scioli
- Potencia Buenos Aires (espacio vecinal con orientación peronista), con Gabriel Petruccelli a la cabeza
- La Libertad Avanza (el sello de Javier Milei, con algunos PRO disidentes), con Ignacio Capeccio como primer candidato
- Valores Republicanos (un mix de peronismo de derecha con sectores conservadores), con Juan Ruberto encabezando la lista
La incógnita principal reside en el desempeño de los nuevos actores. La Libertad Avanza, que ya posee dos bancas en el HCD, aspira a crecer capitalizando el descontento con la política tradicional, mientras que Potencia BA busca posicionarse como una alternativa de centro con figuras conocidas como Petruccelli.
Si las proyecciones se cumplen, el próximo Concejo Deliberante podría presentar una configuración inédita: un oficialismo debilitado pero aún mayoritario, una oposición mayormente peronista fortalecida, y la posible incorporación de concejales de espacios que hasta ahora no tenían representación. Este escenario obligaría a negociaciones más complejas para aprobar iniciativas y podría marcar el inicio de una nueva era en la política local, caracterizada por la necesidad de construir acuerdos transversales.
Lo que está en juego trasciende las nueve bancas en disputa: se trata de la definición del equilibrio de poder en Balcarce para los próximos años, con la mira puesta en 2027, y del rumbo que tomarán las políticas públicas en un contexto de crecientes demandas sociales y desafíos presupuestarios. El domingo por la noche, cuando se conozcan los resultados, comenzará a develarse el nuevo mapa político de una ciudad que parece estar transitando hacia un sistema multipartidario más diverso y competitivo.